Cuando se trata de complementar nuestra dieta con aceites que promueven la salud, el aceite de onagra (EPO) y el aceite de algas DHA destacan por sus beneficios únicos. Estos dos aceites han ganado popularidad en el mundo del bienestar, pero difieren enormemente en sus orígenes, composición nutricional y beneficios para la salud que ofrecen. Comprender cómo se comparan puede ayudarle a decidir cuál puede ser el más adecuado para sus necesidades de salud individuales.
Orígenes y producción
Aceite de onagra (EPO) se obtiene de las semillas de la planta Oenothera biennis, comúnmente conocida como onagra. Esta planta es originaria de Norteamérica, pero puede encontrarse en diversas partes del mundo. El aceite se obtiene mediante un proceso de prensado en frío, que preserva los componentes activos del aceite, principalmente el ácido gamma-linolénico (GLA), un ácido graso omega-6 esencial.
Por otro lado, el aceite de algas DHA procede de algas, concretamente de microalgas, que se cultivan en entornos controlados. El DHA (ácido docosahexaenoico) es un ácido graso omega-3 que suele encontrarse en los pescados grasos, pero el aceite de algas es una excelente alternativa de origen vegetal. El DHA suele extraerse de microalgas marinas y es un componente clave en la producción de células cerebrales y oculares.
Composición nutricional
La principal distinción entre estos aceites radica en el tipo de ácidos grasos que contienen.
El aceite de onagra es especialmente rico en ácido gamma-linolénico (GLA), un ácido graso omega-6. Aunque los ácidos grasos omega-6 son esenciales para el organismo, deben equilibrarse con los ácidos grasos omega-3 para mantener una salud óptima. El GLA es un tipo de ácido graso omega-6 que tiene propiedades antiinflamatorias, lo que hace que el EPO sea popular para la salud de la piel, el equilibrio hormonal y la reducción de la inflamación.
Aceite de algas DHApor otra parte, es una fuente concentrada de ácidos grasos omega-3, en particular DHA. Los ácidos grasos omega-3 son fundamentales para la salud del cerebro, el corazón y la vista. El DHA, en particular, es un importante componente estructural del cerebro y la retina, por lo que el aceite de DHA es especialmente valioso para la función cognitiva y la salud ocular. Además, los omega-3 del aceite de algas son altamente biodisponibles, lo que significa que el organismo los absorbe fácilmente.
Beneficios para la salud
Aceite de onagra:
- Salud de la piel: La EPO se utiliza a menudo para mejorar afecciones cutáneas como el eccema, el acné y la psoriasis. Sus propiedades antiinflamatorias ayudan a calmar la piel y a reducir el enrojecimiento y la irritación. Muchas personas utilizan la EPO para favorecer la retención de humedad y la elasticidad, lo que la convierte en un ingrediente popular en los productos para el cuidado de la piel.
- Equilibrio hormonal: La EPO contiene GLA, que puede ayudar a regular los niveles hormonales. Se suele utilizar para aliviar los síntomas del síndrome premenstrual y la menopausia, como los cambios de humor, la sensibilidad mamaria y los sofocos. Se cree que el aceite influye en la producción de prostaglandinas, que intervienen en la inflamación y el dolor.
- Efectos antiinflamatorios: Como fuente rica en GLA, la EPO puede ayudar a reducir la inflamación del organismo. Esto la hace beneficiosa para afecciones como la artritis reumatoide, en la que la inflamación desempeña un papel fundamental en la progresión de la enfermedad.
Aceite de algas DHA:
- Salud cerebral: El DHA es un componente esencial del tejido cerebral y contribuye a la función cognitiva, el aprendizaje y la memoria. Los estudios han demostrado que los suplementos de DHA pueden ayudar a mejorar la concentración e incluso proteger contra el deterioro cognitivo en los adultos mayores. Es especialmente importante durante el embarazo y la infancia para el desarrollo fetal y cerebral.
- Salud ocular: El DHA es una parte esencial de la retina, donde ayuda a mantener una visión sana. La suplementación con aceite de algas DHA puede ayudar a proteger contra la degeneración macular asociada a la edad (DMAE), una de las principales causas de ceguera en los adultos mayores.
- Salud del corazón: El DHA desempeña un papel clave en el mantenimiento de unos niveles saludables de colesterol y en la reducción de los niveles de triglicéridos, lo que puede reducir el riesgo de cardiopatías. También se sabe que los ácidos grasos omega-3 como el DHA favorecen la salud de la presión arterial y el funcionamiento de los vasos sanguíneos.
- Propiedades antiinflamatorias: Al igual que la EPO, el DHA tiene efectos antiinflamatorios, por lo que es beneficioso para afecciones como la artritis y otras enfermedades inflamatorias.
Sostenibilidad e impacto ambiental
Un factor importante a tener en cuenta a la hora de elegir entre estos aceites es la sostenibilidad. El aceite de algas DHA se considera a menudo una opción más sostenible porque es de origen vegetal y no requiere pescado para su producción. El cultivo de algas puede tener un impacto medioambiental menor que la pesca, que está relacionada con la sobrepesca y el daño al ecosistema oceánico. Por ello, el aceite de algas DHA resulta atractivo para quienes siguen dietas vegetales o veganas, así como para quienes se preocupan por el impacto medioambiental de sus suplementos.
El aceite de onagra, aunque no es tan controvertido desde el punto de vista de la sostenibilidad, sigue derivándose de una planta que requiere grandes cantidades de tierra y agua. Sin embargo, en comparación con los aceites de origen animal, como el aceite de pescado, se considera una opción más sostenible.
Posibles efectos secundarios
Ambos aceites suelen ser seguros para la mayoría de las personas cuando se toman en las cantidades recomendadas, pero pueden provocar efectos secundarios en algunos individuos.
El aceite de onagra puede causar molestias gastrointestinales leves, dolores de cabeza o reacciones cutáneas. También es importante señalar que la EPO puede interactuar con medicamentos anticoagulantes, aumentando el riesgo de hemorragias. Las mujeres embarazadas o en periodo de lactancia deben consultar a su médico antes de tomar EPO, ya que no se conocen bien sus efectos durante el embarazo.
En general, el aceite de algas DHA se tolera bien, pero dosis elevadas pueden provocar problemas digestivos, como náuseas, regusto a pescado o diarrea. Es importante asegurarse de que el aceite de DHA está libre de contaminantes como metales pesados, que pueden ser un problema con los aceites a base de pescado, aunque los aceites a base de algas suelen estar libres de tales contaminantes.
Conclusión
Tanto el aceite de onagra como el aceite de algas DHA ofrecen beneficios únicos para la salud. El aceite de onagra se centra más en la regulación hormonal, la salud de la piel y la inflamación, mientras que el aceite de algas DHA contribuye a la salud del cerebro, los ojos y el corazón. La elección del aceite puede depender de sus objetivos de salud específicos y de sus preferencias dietéticas.
Si busca un suplemento que le ayude con la salud de la piel o el equilibrio hormonal, el EPO podría ser una buena opción. Si su prioridad es la salud cerebral, cardíaca u ocular, el Aceite de Algas DHA podría ser la mejor opción. Además, el aceite de algas DHA ofrece una alternativa más sostenible y vegana que el aceite de pescado, por lo que es una gran opción para aquellos que buscan reducir su impacto medioambiental.